domingo, 2 de noviembre de 2008

Hablemos de cosas importantes

Que importante que es ganar un clásico. Que importante es jugar bien. Que importante es ser puntero (aunque sea compartido). Que importante es que Boca demostró que está a la altura de la circunstancia. 

Cuando más tenía que aparecer el equipo, apareció. O por lo menos durante los primeros 45 minutos.

El primer tiempo fue un dominio total de Boca, decir que se merecía terminar arriba por más de un gol es poco. Boca manejó el juego, las situaciones, las chances, todo. En la primera mitad se vio, tal vez, al mejor Boca del torneo, pero sin embargo solo logró terminar arriba por un gol. Existía el sentimiento de que era poco y que el desgaste hecho por los jugadores podía llegar a jugarle una mala pasada a Ischia.

El segundo tiempo arrancó igual, con dominio Xeneize, por lo menos los primeros 15 minuts. Pero… con el correr de los minutos, y con San Lorenzo cada vez mas adelantado, Boca se vio obligado a defenderse con uñas y dientes y aferrarse al 1-0.

Y así fue nomás, importante victoria de local, contra uno de los rivales directos para subir a lo más alto del torneo y compartir el 1º puesto con CASLA y Tigre que perdió con Argentinos 2-0 el sábado. 

Quiero remarcar algunas actuaciones del partido de hoy.
Podría hablar primero de Román por su gol, de Mouche por las ganas, de Battaglia por la marca, de Caceres y Paletta por sus cortes… pero no, hoy tengo que reivindicarme y aplaudir a Datolo por el partido que hizo.
Jesús tuvo que bailar con la más fea y cumplió casi a la perfección. En el primer tiempo, con espacio, ya que San Lorenzo prácticamente no atacaba por su lado, pudo juntarse con Riquelme y Pablito Mouche quien se recostaba sobre su lado y armar el juego por allí. En cambio en el segundo salió el luchador y marcador para cerrarle la cortina del ataque por la derecha al cuervo. Dátolo corrió más que de costumbre, marcó como nunca y llegó siempre para ayudar tanto abajo como arriba. Entendió que hoy su papel era diferente. Al jugar sin 3 definido (con Caceres, Paletta y Roncaglia como centrales) tenía que atrasarse muchísimo más que de costumbre y casi ser un 3 mentiroso, sin olvidarse de siempre estar activo en ofensiva, y así lo logró. Sacrificio, sudor y mucha garra del 23. Lo aplaudo. 

Con el tema defensa, Ischia improvisó un raro esquema defensivo con 3 centrales e Ibarra de 4 y su idea no fue tan loca. Entendió de movida que el rival no iba a atacarlo por su izquierda (por lo menos no al principio) y así se preocupó más en tomar hombre a hombre a los dos delanteros centrales cuervos y dejar un defensor más libre que actúe de líbero. Así fue, durante los primeros 45 minutos San Lorenzo no sabía que hacer, no atacaba por la derecha y eso le simplificaba las cosas a Boca que se encontró muy cómodo durante ese periodo. Para el segundo tiempo Russo cambió las cosas, empezó a atacar por su derecha y ahí entra lo que recién hablábamos de Dátolo.
Buen partido tanto de Caceres con de Paletta, no tan así de Roncaglia, que aunque no tuvo un mal encuentro, cometió todos los fauls que le dieron a San Lorenzo las únicas oportunidades de gol con varios tiro libres. 

En el medio Battaglia una vez más se comió la cancha, Vargas, a pesar de su prematura amonestación llevó el partido de manera brillante y Román apareció cuando hacia falta marcando el único tanto del juego.

Adelante: Mouche buscó su gol todo el tiempo, incluso en un tiro que rozó el palo izquierdo de Orión cuando tenía por el medio a Riquelme y más abierto a Datolo, ambos totalmente solos para definir. De todas formas, gran partido del 7 que sigue aprobando los examenes que rinde en la primera de Boca.
De los dos nueves, cortito: regular partido de Viatri, erró un par claras. Y una actuación imposible de evaluar de Lucho Figueroa, que todavía no está en forma, aunque hoy se lo vio con las movilidad y ganando varias por arriba. 

Para cerrar, hablamos de lo importante: lo importante era ganar  y se logró. Lo importante era ser primero y se lo es. Lo importante es que Boca apareció de nuevo, que después de las peleas del plantel y la triste perdida de un ser querido y respetado como Pompilio un equipo se despertó y está más vivo que nunca. 

Por último, el jueves la revancha con Inter de local con los chicos. Hay que ganar por 3 goles, está difícil, pero la confianza está intacta.

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