domingo, 24 de abril de 2011

Demasiado fácil

Boca derrotó con toda comodidad al Globito del Tito Pompei que, por lo menos a mi, me dio pena.
Con goles del Pochi Chavez, Colazo y, por fin, Palermo, el Xeneize despachó sin problemas a un rival tan blandito que todo lo bien que se pueda haber jugado, queda opacado al entender quien estuvo enfrente.

No se puede negar que el equipo de Falcioni fue ampliamente superior a Huracán. Aun con menos posesión de pelota a lo largo de todo el primer tiempo, Boca jugó definidamente mejor que el rival e hizo lo que no pudo a lo largo de todo este Clausura: Tener varias llegadas de gol. Un cabezazo de Palermo, un remate del pibe Colazo, un tirito de Martín además de, claro, el gol del Pochi, le daban al Xeneize esa sensación que no había logrado tener a lo largo de todo el torneo. La facilidad para crear situaciones de riesgo en el arco contrario fue sorprendente, no tanto por el asco defensivo de Huracán, sino porque ya a esta altura, uno creía que era imposible que Boca cree más de una o dos jugadas de peligro en un tiempo.
Pero, con el equipo que tiene el Tito, digamos que, si no ganabamos este partido, además de putear a los jugadores, ibamos a tener que castrarlos, porque en serio, mas fácil no podía ser.
Tan fácil fue este encuentro para Boca, que después de que el Titán erre innumerables situaciones de gol, la defensa quemera le dio la posiblidad a Mouche de que haga una bien y lo deje solo a Martín para que, de una vez por todas, rompa la racha negativa que acarreaba desde el inicio del torneo.

Los primeros 45 minutos se iban con un Xeneize claramente superior al rival, con la tranquilidad del gol de Chavez y la sensación de que podría haber sido más amplia la diferencia. Al parecer, no fui el único que imaginó tal cosa. Ni bien comenzado el ST, a los 35 segundos para ser más precisos, una de las mil pelotas que Martín ganó por arriba le cayó a Mouche que tocó bien de primera para Colazo que con un correcto enganche y un remate perfecto, venció al arquero Monzón, quien sería finalmente el principal culpable para que la victoria Xeneize no sea más abultada.

En ese momento, la tranquilidad total. No había miedo de que Huracán lo empate, o mejor dicho, no que lo empaten los jugadores del Globo. Conociendo a Boca, este era de esos partidos ultra accesibles que por confiarse, o simplemente por lo mal que juega el Xeneize, se iba a terminar o empatando, o hasta perdiendo por tontos. Pero, por suerte, o mejor dicho, gracias a la absoluta nada que tiene para ofrecer el equipo de Parque Patricios, Julio Cesar Falcioni podrá contar con una nueva semana tranquila para trabajar, claro, teniendo en cuenta que lo más probable sea que nunca más en lo que resta del torneo, encuentre un rival que de tantas garantías por todos lados.


Insisto, no se puede negar la superioridad de Boca, pero hay que tener en cuenta el factor más importante para que esto haya ocurrido: Enfrente estaba el equipo más flojo de la actualidad.

En Resumen: El Xeneize derrotó sin problemas 3 a 0 al globito que sea desinfla a toda velocidad, consiguió por primera vez un triunfo abultado y tranquilo, jugando bien y pareciéndose mucho a aquel buen conjunto que vimos en el verano. El 4-4-2 funcionó a la perfección y sin la presencia de Román, el equipo apareció cuando más simple la tenía, pero a su vez, cuando más jodida se le presentaba.
Boca ganó, y es lo único que importa. Ahora a pensar en el Rojo, próximo rival, el viernes en la Bombonera (fecha adelantada por el domingo 1º de mayo) y a mentalizarse en conseguir nuevamente los 3 puntos, en pensar en el partido a partido, olvidarse del torneo, de los puntos de distancia con los de arriba (que son muchos, vale la aclaración) más allá que en esta fecha hayan perdido terreno y a ponerse en la cabeza una sola cosa: Ganar el próximo encuentro, nada más.


Las buenas:
- Ganar con tranquilidad y superioridad. Algo que no se veía desde el verano.
- El retorno al gol de Palermo, lástima que tuvo que errar 15 antes, y que el gol se lo tuvieron que dar dejándolo literalmente solo enfrente del arco, sin arquero ni defensores.
- El buen juego de los volantes: Correcto Somosa, muy bien Erviti, y ni hablar de Chavez y Colazo, ambos, premiados con un gol para cada uno, cerraron un gran encuentro.

Las malas:
- La cantidad de situaciones que desperdició Martín.
- Los trece mil rechazos inútiles de la defensa de Boca: me tienen podrido Insaurralde y Caruzzo regalando cada pelota que tienen por no complicarse (ni nada parecido).
- Que nos toque solo una vez en el torneo Huracán como rival.

Cortito de cada jugador:

20- Luchetti: Tapó un pelotón ya cuando el partido estaba liquidado, de todas formas, correcto en todo su repertorio.
2- Cellay: Excelente en la marca, desastroso en el juego. Lo dije mil veces no me cansaré nunca, Cristian NO es lateral. No insista JC!
6- Caruzzo: Lo dicho, cientos de rechazos al pedo cuando podía jugar por abajo. Correcto en la marca.
13- Insaurralde: Exactamente lo mismo que el anterior.
18- Monzón: No jugó tan mal, pero tampoco jugó tan bien. Sigue demostrando la falta de sangre en su interior partido a partido.
16- Somosa: Correctísimo partido. Marcó bien, jugó bien.
11- Erviti: Aun estacionado muy por detrás de donde uno preferiría verlo, marcó mucho y muy bien. También jugó bien con el balón en su poder, pero, insisto, personalmente me gustaría verlo un poco más suelto adelante a la hora de atacar.
21- Chavez: Figura del partido, por el gol, por su actitud y juego. Encaró siempre que pudo, tuvo la visión no solo para marcar por su lado, sino para dejar en más de una ocasión a un compañero libre para anotar.
15- Colazo: Segundo en el podio. Al igual que en verano, tuvo tanto llegada y gol como sacrificio y marca. Muy buen partido del pibe que se perfila como nuevo dueño del puesto.
7- Mouche: Hizo las tres asistencias, pero jugó mal. Salvando esas 3 jugadas, el resto, se equivocó cada vez que tuvo la pelota, no pudo superar nunca a su marca en el mano a mano, y cuando logró hacerlo, regaló cada centro que partía desde su pie. De todas formas, si va a jugar siempre así de mal, pero va a hacer 3 asistencias por partido, no me quejo.
9- Palermo: Era hoy o nunca, está clarísimo. Tuvo tantas chances que si no entraba hoy, era al pedo que juegue de acá en adelante (de todas formas lo iba a bancar a muerte). Erró un cabezazo de esos que no pifia en el PT, definió suave de derecha para la gran tapada del arquero quemero, para el ST estrelló otro cabezazo en el travesaño y cuando había amagado al 1 rival, un defensor le ahogó el grito… por suerte, la horrenda defensa de Huracán y la buena decisión de Mouche le dieron por fin el desquite a Martín que volvió a gritar un gol luego de 11 fechas de sequía.

El video con los 3 goles de Boca:

lunes, 18 de abril de 2011

Uy uy uy…


En un partido lleno de emociones con 6 goles Boca empató con Tigre y volvió a perder puntos en casa, puntos de esos que no se pueden perder.

El equipo del queridísimo Vasquito Arrruabarrena salió a la cancha sabiendo desde el inicio que sería el Xeneize y como jugaría. Con esto, logró ponerse en ventaja con dos goles a los 35 minutos del primer tiempo, sin necesidad de ser superior, pero sabiendo cuando golpear.
Hasta los 21’, momento de la primera de las tres pepas que metió Stracqualursi, Boca era levemente superior al rival, pero apenas inquietaba al arco contrario. Un débil disparo de Mouche y un buen remate de Riquelme que el travesaño lanzó a las tribunas, eran las primeras muestra de un cambio con respecto a los partidos anteriores: Se pateaba al arco. Digamos, una y media en 20 veinte no estaba mal para lo que nos tenían acostumbrados. Pero… primer centro que más o menos inquietaba el arco de Luchetti, y listo. Stracqua anticipa perfecto al pibe Ruiz, de muy mal partido, y estampa, casi en el ángulo, el 1 a 0 para Tigre. Y para Boca: el sentimiento del baldazo de agua helada que recibe un mediocre participante de preguntas y respuesta de la TV al fallar, ese que se sabe que indefectiblemente va a recibir, pero por más que intente evitarlo, se llevará. Y ahí, la hecatombe total.

Jamas, pero JAMAS, vi jugar a Boca tan, pero tan mal en esos 15 minutos entre un gol y otro de Tigre. Todo lo que haya dicho en anteriores post (notas o como lo quiera llamar) no se asemeja ni por casualidad a lo que se vio entre el minuto 21 y el 35 de la primera parte.
El equipo de Falcioni pasó de ser un equipo profesional (y ni hablar de la categoría donde juega, y la categoría que debería tener por el simple hecho de ser Boca) a ser un equipo amateur, de esos que se anotan un año para ver que onda, y se disuelven antes de que termine el campeonato.
Errores, de todas las formas y pasando por todas las líneas. Si antes pensaba que lo que veía era lo peor y mas bajo que se podía caer, estaba equivocado. Esto es por mucho lo peor que vi jugar, ya no a comparación de otros Bocas, sino con cualquier otro equipo que haya visto.
De todas formas, no me vuelvo loco y entiendo que esos momentos duran cuanto?, 10, 12 minutos… ok pero…¿Y si duran más?

La aclaración: Nuevo centro, este desde el otro lado, el 9 de Tigre (que lleva la 22 en la espalda) se anticipa a Gastón Sauro, otro pibe de la defensa (que debutó hace 2 años y medio en Boca…) y a guardar. 0-2 y el recuerdo de Godoy Cruz, la camiseta gris y ese cascotazo en el bocho al inicio del torneo.
Pero, gracias al enojo de Riquelme y su contagio para el resto, Boca en una ráfaga lo empató y se llevó al entre tiempo un 2-2 impensado.
La justicia, por la jugada que armaron Román y Martín, y la actitud, que le pasó la pelota al pibe Colazzo, le dieron, a los 43’, el 1-2 al Xeneize junto con la sensación de que se podía. 2 minutos más tarde, Mouche tocó para Clemente, éste para Román y el 10 con un fuerte, pero bien colocado disparo, decretó el 2-2 y la levantada fantástica que nadie creía posible.

Fin de la primera parte, llena de emociones y ratos de fútbol. Un cambio de actitud y una llama de esperanza aparecían en la cancha y en todos lados. Boca podía ganar este partido, lo que si, debía mantener ese nivel que mostró en los últimos 10 del primer tiempo, pero… Como si hubiera empezado el partido de nuevo. Nada de nada… control, pero sin ideas ni situaciones.
Veinticinco minutos del segundo tiempo, y el error infantil de Ruiz que ya cerraba un partido para el olvido. Inentendible el penal que hizo este pibe, clarísimo e indiscutible. Tonto, infantil, obvio… tercero de Stracqua y otra vez a lo mismo.

33 del segundo, y la joya que le faltaba al partido. Con el ingreso del Pochi por Colazzo (a mi entender de correcto partido), Clemente pasó a jugar por izquierda, y ahí parece que se acomodó. Mejoró mucho y lo demostró con un golazo fusilando a Islas que nada podía hacer. Empate en tres (gol del 3 a los 33 para el 3 a 3…) y el resto del partido pasó como si ambos quedaran satisfechos y a mano.

No se crearon muchas más situaciones de peligro, nadie… y la igualdad daba su cara nuevamente, con otro festín de goles como bien nos tienen acostumbrados Tigre y Boca en la Bombonera (2-3 en el 2008 y en el Ap. 2009, más un 6-2 del Cl. ’09…)

En resumen: Boca volvió a perder puntos en casa y si alguien todavía tenía una idea de esperanza por aquel triunfazo con Estudiantes, ahora se terminó por completo y nos dejó bien en claro para que estamos, o mejor dicho, para que NO estamos… los momentos futbolísticos son por partes preocupantes y por otros esperanzadores. Se vieron todas las versiones de este equipo en cancha. El tímido durante el 0 a 0, el grogui en el tiempo del 0-1, el renacentista en el 0-2, el león de guerra con hambre de un año en el 1-2, y cuando hicimos el 2-2 y estábamos para pelear la guerra, estos 11 contra todo el ejercito Nazi!... Se terminó la película.

Cuando podía volver a empezar, ya está, ya se había terminado, y definitivamente todo terminó en un empate que dejó un punto (¿es más que ninguno? yo me pregunto) para cada lado, resultado que no le convenía a ninguno, pero a cierta altura del partido, a ambos le convino.


Las Buenas:
- La actitud en el 0-2 para levantar y hacer dos goles en 3 minutos.
- Los momentos con energía, y por sobre todas las cosas con ganas, de Román. Cuando quiere jugar, uno quiere saltar a la cancha y darle un abrazo.
- La vuelta al gol de Clemente y Colazzo, uno tratando de volver a lo que supo ser, y otro demostrando que se banca la parada.

Las Malas:

- El peor nivel de juego posible durante el 0-1.
- Que las ganas de Román duren por tiempo limitado, y que siempre sean a partir de que le mojen el culito a Boca. Juan, necesitamos que jueguen siempre con ganas, no solo “cuando es totalmente necesario”, porque simplemente ahora (o sea durante todo el partido) es totalmente necesario.
- La racha de Martín: No jodan, no le tiraron una… y esta vez tan mal no jugó (si lo se, tan)

Cortito de cada player:

20-Luchetti: Sin culpa en los goles, pero si en jugadas. El penal por ejemplo, se evita gritando y cortando esa pelota volando en el área.
6- Caruzzo: El peor partido de Matias (esto ya lo dije eh, pero este fue inferior a todos los otros). No supo manejar a los pibes, no supo ganar pelotas, hizo fauls estúpidos. No recibió una roja de tarado por un patadón innecesario, porque el referi era Pompei y se sabe, es medio estúpido.
19- Ruiz: Perdió en el primero, dejó tirar el centro en el 2º y cometió el penal más boludo para el final. Completita la hiciste nene.
26- Sauro: Cuando apareció allá por el 2008 era bueno, pero después pasó J.C. Caceres y le enseño sus trucos. Pibe, fuiste… (en el partido simil al 19, solo que éste no hizo un penal pelotudo)
16- Somosa: En general mal. Por momento pésimo. Robó algunas pelotas en el medio, es verdad, pero perdió la otra gran mayoría.
11- Eviti: Nuevamente de menor a mayor, pero esta vez todo en el primer tiempo, fue el primer soldado detrás de Riquelme para la levantada. Para el ST se planchó como el resto.
3- Rodriguez: Por derecha, parejito a lo que se venia viendo, ergo: mal. Cuando cambió de lado, le dio al equipo, además de un gran gol, una opción constante de juego.
15- Colazzo: Sin tener un gran partido, fue de lo mejorcito de Boca. Un buen gol con derecha y buenos momentos con Román y con Erviti. Salió para le entrada de Chavez:
10- Riquelme: Lo dicho, cuando quiere jugar, marca la diferencia como ningún otro jugador de Argentina, Es una pena que no siempre aparezca, y los lapsos sean, en su gran mayoría, de corto lapso.
7- Mouche: Nueva oportunidad, nueva demostración de inferioridad mental. No ganó NUNCA a la hora de encarar, y cuando entendió que no iba a poder pasar a su marcador, tocó para atrás en todas. Para hacer eso jugando de 7, dejá macho, pedí el cambio y que pruebe otro.
9- Palermo: No le tiran una ni por putas. Esta vez mejoró a la hora de asociarse, perdiendo, de todas formas, varias pelotas.
27- Viatri: Entró con muchas ganas, pero al toque se contagió de la fiebre Xeneize y desapareció
21- Chavez: Mostró la actitud de siempre para perderla como siempre.

Los goles del partido:

lunes, 11 de abril de 2011

Asco

Se acabó la mentira que nos hicieron creer estos dos últimos partidos. Boca volvió a ser la vergüenza que nos tenía acostumbrados y sumó una nueva derrota dando pena ante Lanus que con poco se llevó un partido que fue, desde su inicio, un verdadero bodrio (como nos tiene acostumbrados el Xeneize).

El primer tiempo se puede resumir en la casi llegada del Granate con ese resbalón de Diaz, y las dos pelotas que saca Caranta, una al Pochi Chavez y una de Riquelme. El resto del primer tiempo: zzzzzz.
El complemento no fue nada diferente, hasta el gol de Valeri, nada pasaba y había que hacer zapping para no quedarse dormido. Queda claro, hasta los 34’ del ST ni Lanus ni Boca eran superiores, y ninguno merecía nada más que el amargo empate. Pero, los goles no se merecen, se hacen, y en eso el Grana fue ampliamente superior al equipo de Julio Cesar. Una linda jugada por el lado izquierdo de la defensa de Boca, se juntaron los que saben del local, llega el balón al área, el mamarracho de Cellay que solo queda peor parado a lo que ya estaba, la pelota para Valeri, y listo, éste no perdonó, 1 a 0 y terminado el partido. Bueno, más tarde, y SOLO porque la defensa de Boca es una garantía a la hora de atacarlo por arriba, de un corner llegó el definitivo 2-0 con un cabezazo de Santiago Hoyos que le sacó un cuerpo de ventaja en el salto a Insaurralde (vale aclarar, lo de “salto” solo corre para el jugador de Lanus).

Lo de Boca es, nuevamente, penoso. Es inentendible como, después de un gran partido como el del fin de semana pasado ante Estudiantes, un equipo puede caer tanto en su rendimiento al punto de prácticamente no crearle situaciones de peligro a un rival, digamos, de medio pelo.
Lo mal que jugó Román es para llorar. Queda claro esto y ni hablar que está de más decirlo, pero si el Diez no juega, al resto ni le pidamos un pase. Si Riquelme no quiere jugar, olvídense muchachos, no le ganamos a nadie. Me quedo con los primeros 2 minutos del segundo tiempo para demostrar lo que fue el 10. Cuatro pelotas tocó, 3 seguidas al lateral (no estoy jodiendo) y un pase al 5 rival.
Lo único que hizo bien en 90 minutos fue la última del PT, ese remate que Caranta saca al corner, que tampoco fue un tiro espectacular, pero para lo que era Boca en ese momento (y terminaría siendo en todo el partido) fue sin dudas lo mejor.

Realmente no hay mucho para hablar, decir lo mal que juega Boca, lo aburrido que es verlo jugar al equipo de Falcioni, las faltas de ideas, las prácticamente nulas posibilidades que le fabrican al delantero de área (sea Martín o Viatri el 9), lo PESIMO que defiende la última línea, lo horrendo que es el arquero (Crsitian, que hayan anulado ese gol no borra que te ganaron por arriba, el jugador de Lanus con la cabeza y vos con las manos), las pocas ideas del medio, las interminables pelotas perdidas en mitad de cancha por no saber que hacer con ella, las pelotas perdidas por desconcentraciones imperdonables (el pase de Insaurralde a Monzón de espaldas es para matarlos a los dos), y tantas otras cosas, las mismas que vengo repitiendo –salvo el partido pasado- domingo a domingo.
Lo de Boca es penoso, horrendo, doloroso, para ponerse a llorar del dolor de ojos que produce verlos jugar. De tan solo pensar que ganan fortunas por esta vergüenza que nos hacen pasar cada fin de semana es para pegarles un cachetazo a cada jugador, hacerles entender, a TODOS que están jugando en BOCA, que si no les da para jugar en Boca, que agarren sus cosas y que se vayan, pero si se van a quedar, y realmente creen que tienen el nivel, el corazón y las ganas de jugar con la azul y oro en el pecho, que se dejen de joder y empiecen a demostrarlo. La vergüenza que da ver a esos 11 jugadores en cancha ya es indescriptible… que tiren tantas pelotas afuera por malos pases es desesperante.

La verdad, no hay ganas para hablar, Boca no se lo merece. La institución que llegó a ser lo más grande del mundo no se merece esto, no debería recibir insultos, broncas, gritos y todo lo que estos jugadores obligan a hacer.
Basta muchachos, el que se la banca que se quede y juegue, pero que juegue en serio, el que no, gracias, pero chau. No estamos en épocas como para tener gente sin ganas. Boca es deportivo Ganar, y si bien es imposible ganar siempre, por lo menos háganos creer que lo quieren hacer, porque jugando así… mamita...

Las Buenas:
- Vacante

Las Malas:
- Todo lo que hizo el equipo en 90 minutos… perdón, en 8 fechas.
- La continua sequía de Palermo, esta vez tan solo le tiraron UNA pelota al área.
- La necesidad imperiosa de que Riquelme juegue bien. Nunca aparece otro para salvar las papas, nunca hay otro jugador que se ponga el equipo al hombro y saque este barco a flote. Nunca.

En resumen: Boca nuevamente fue un asco y volvió a la derrota, tras dos buenos triunfos, perdiendo de la peor manera, dando pena. Nunca estuvo ni cerca de ganar el encuentro y terminó llevándose del sur bonaerense lo que merecía, un 0-2 que terminó siendo justo, más por el asco deportivo que ofreció el equipo de Falcioni que por los meritos que pudo tener Lanus.

Cortito de cada jugador:
20- Luchetti: Salvado por un offside zafó de ser el principal culpable de la derrota. Sin culpa en los goles.
2- Cellay: Aunque estuvo bien en la marca, el mamarracho que hace en el primer gol lo condena.
6- Caruzzo: Mal, como los últimos partidos.
13- Insaurralde: Horrible. En el segundo gol, ni siquiera saltó. Gracias a la 5º amarilla no estará contra Tigre.
16- Somoza: Mucho malos pases, pocas pelotas recuperadas… esta vez ni pateó al arco.
3- C. Rodriguez: Otro horrendo partido del pelado, uno más y van…
18- Monzón: Lejos el peor jugador de Boca en la tarde de domingo, se lo comieron en un pancho cada vez que lo atacaron por su banda. De más está decir que el primer gol llega desde su lado.
11- Erviti: Recibió muchísimas más patadas de las que merecía. O no, está bien, las merecía, pero por lo mal que jugó.
21- Chavez: Si con ganas juega mal, imaginense sin.
10- Riquelme: El peor encuentro en dos años (o sea, de 5 partidos).
9- Palermo: Tuvo una sola, un cabezazo que le entregó a las manos a Marchesin.
27- Viatri: Entró, al igual que con el Pincha, a los 20 de ST por el Titan, esta vez no cambió nada.
7- Mouche: Ah ¿entró?
23- Orfano: Ingresó los últimos 8 minutos, creo que ni la tocó.

Los goles de este Lanus 2 – Boca 0:

lunes, 4 de abril de 2011

6 pájaros de un tiro

Dos victorias al hilo, el primer triunfo de local, dar vuelta un partido por primera vez, 2 goles en un mismo partido también por primera vez en el campeonato, el hecho de volver a ganarle a Estudiantes después de 4 años (léase 8 campeonatos) y por fin un gol en el primer tiempo, son las seis aves que Falcioni y su Boca derribaron con esta tremenda victoria ante el Pincharata para escaparle al fondo de la tabla y meterse en el pelotón de esos 5 puntos que separan del 1º al 13 º puesto.

La realidad es que después de muchísimo tiempo Boca volvió a jugar bien un partido de fútbol y ganó, bien, cuando más complicada la tenía.
El rival de turno, único puntero hasta el momento y considerado por muchos como el mejor equipo de Argentina en la actualidad (me incluyo), era temido y visto de reojo con el sentimiento de que volveríamos a ver la misma figurita que vemos cada 15 días en nuestra cancha. Pero, los jugadores, que más que nunca debían demostrar que no estaban muertos y que no había sido una casualidad lo visto con Colón hace una semana, salieron a comerse la cancha, y a pesar de los errores que seguimos cometiendo, se llevó finalmente un partido que mereció ganar durante todo su desarrollo.

En el inicio el Xeneize era más, o tenía más ganas. La pelota la tenía el medio ultra plagado de gente de Boca y se divisaba un buen encuentro, pero... el karma de Boca desde hace años, la defensa, jugó su carta infaltable. Somoza no cabeceó y dejó pasar la pelota (calculo que ante el grito de algún compañero, quiero imaginar), la dormida de los defensores, la pelota que se abre, llega el centro, pésimo el movimiento de Insaurralde que deja absolutamente solo a Rodrigo Lopez, que con todo el tiempo y espacio del mundo, la deja picar y fusila a Luchetti que nada podía hacer ante semejante remate.
1 a 0 abajo, en 7 minutos y el peor de los escenarios se hacía presente en la Bombonera. La resignación que se sentía en el ambiente era grosera. Si ya veníamos mal, sin ganar de local, sin poder hacer goles desde la primera fecha y con lo pésimo que se estaba jugado, el 0-1 sonaba a golpe de KO en la primera piña, solo que en este caso, todavía quedaban 83 minutos obligatorios más de pelea.

Pero, apareció el 10, y en un rato, y con otro excelente tiro libre (fabricado por él mismo) emparejó las cosas, poniéndole un poco de justicia al marcador.
Que golazo que hizo Román, perdón, que otro golazo hizo Román. Y éste todo de él, agarró la bocha cerca del área, se ubicó donde más le parecía, se tiró y se cobró a si mismo el tiro libre ideal. Luego la acomodaría cerca del palo izquierdo de Orión, que por más estirada que pegaba, poco podía hacer. Empate nuevamente, y a volver a empezar.

Boca era más que Estudiantes, que solo inquietaba al Xeneize por alguna que otra pelota parada que tan solo morían en intentos, y mostraba una cara diferente a la que nos tenía lamentablemente acostumbrados. Aunque con muchas pelotas perdidas, Somoza era quien comenzaba el trabajo de control de pelota. Clemente y Calvo no desentonaban y por momentos tanto Erviti como el Pochi Chavez se juntaban bien con el 10 y entre ellos. Pero, las llegadas no aparecían. Con apenas un par de ocasiones en el primer tiempo, Boca se fue al descanso tranquilo, con un empate y 45 minutos para dar vuelta la historia, ya con el cambio de Monzón (que sin tener que concentrarse en la marca mejoró mucho) por el Pampa Calvo cuando la lluvia caía sobre el estadio Alberto J. Armando. Lluvia que duró no más de 10 minutos, pero, al parecer, funcionó de impedimento para jugar libremente, y en ese rato, hasta que terminó la primer parte, el encuentro pareció caer en un pozo.

Para el segundo tiempo el Xeneize volvía a imponerse en el verde césped y seguía siendo más que el equipo del Toto Berizzo, que ya miraba el partido desde el vestuario, pero no podía concretar y parecía que una vez más no se lograría un triunfo en nuestra casa. Palermo, con mínimas chances, no podía cambiar el rumbo de su peor racha con la azul y oro, y a los 20’ del complemento dejó la cancha para que ingrese Viatri. Y acá el partido cambió totalmente.
La entrada activa de Lucas le cambió para bien (perdón, para mejor) la cara a Boca. El salir a buscar más, no solo le dio oportunidades al xeneize, como aquel buen pase de Viatri para el Pochi, la excelente definición y el horrendo fuera de juego que le cobraron a Chavez que en esa ocasión estaba habilitado por casi medio metro, sino que también abrió un poco el partido para el de enfrente y se convirtió lentamente en un leve ida y vuelta.

Ahí rescato un momento importantísimo del partido. El gran cambio de Julio Cesar, adentro Mouche por Chavez. Dos de punta, y una actitud ofensiva clara, sin, por supuesto, olvidar la parte defensiva. Estudiantes casi no asustaba a Luchetti y en esas que el Pincha iba con sus torres a buscar un cabezazo salvador en un corner, Boca encontró dos contras con mayoría numérica, ambas, desperdiciadas por Clemente, que hasta ese momento no reprobaba. Con dos pésimas decisiones, a base de malos pases y pobres ideas, el 3 recibía todos los gritos de los cuatro costados de un estadio que no podía aceptar a esa altura, que el triunfo se escape una vez más.

90 minutos, y el empate que parecía inevitable. Hasta que Mouche (excelente suplente… que lo siga siendo) encaró por derecha, tiró un muy buen centro al corazón del área y Viatri, con un movimiento a lo Palermo, se anticipó perfecto al defensor Pincha y colocó, con una gran palomita, la pelota pegada al palo derecho del arquero. Gol importantísimo para ganar un partidazo y, aunque todavía estemos lejos y haya muchos equipos en el medio, en un campeonato tan parejo y malo, por sobre todas las cosas, todo esto hace que con estas dos victorias al hilo, esos 5 puntos (hasta que jueguen Velez-CASLA) no parezcan tanto.

Aunque, a quien queremos mentirle? Boca debe pensar en el partido a partido, en sumar para no preocuparnos en unos meses, en no ver la tabla de posiciones, para ni ver donde está, ni para ver donde está el rival, porque no interesa si es el mejor, como Estudiantes, o el peor como Quilmes, Boca siempre tiene que ser protagonista en sus partidos y demostrarle a propios y extraños que hay material para jugar bien, que con ganas se puede y que por sobre todas las cosas, que Boca sigue siendo Boca, en su cancha o de visitante.
Hoy vimos que se puede, que cuesta, pero se puede. Que si todos tiran para el mismo lado la nave toma rumbo, y que con actitud y garra, con los pros y contras conocidos el equipo puede dar para cosa seria, logrando cosas serias y consolidándose día a día. Por lo pronto, a disfrutar de esta victoria, como dije, que no se daba contra este rival desde el Clausura 2007 (con una final perdida en el medio) y a pensar en Lanús, próximo rival del conjunto de Falcioni que de a poco va encontrando el mejor funcionamiento de su equipo.

En Resumen: Boca logró una gran victoria, jugando bien después de mucho tiempo, siendo superior a un gran rival y sacándose más de una mochila enorme de encima. Ganó y bien, y eso hay que remarcarlo.

Las Buenas:
- Todo lo dicho: Ganar de local, hacer dos goles, dos victorias seguidas, dando vuelta el resultado...
- Los cambios y las actuaciones de quienes ingresaron: Bien Julio Cesar en cada decisión, determinantes Mouche y Viatri para cambiar la historia en la última.
- La actitud y el nivel de Riquelme. Lo dije mil veces: cuando Román tiene ganas de jugar, se nota, y es otra cosa.

Las Malas:
- Los errores defensivos. A demás del gol, muchos errores, especialmente por el lado izquierdo.
- Las malas decisiones a la hora de atacar. A lo de siempre, se agrega que cuando tenemos una contra, somos muuuuy boludos a la hora de llevar acabo una idea.
- La sequía de Martín. Sigue sin meterla, llega al record y preocupa, no tanto que no marque, sino que ni siquiera tenga ocasiones.

Comentario de cada jugador:
20- Luchetti: Sin ningún tipo de culpa en el gol, y sin ser exigido demasiado a lo largo del partido, terminó con un saldo positivo.
2- Cellay: Muchísimo mejor que los partidos pasados. Como dije la semana pasada, de zaguero central mucho mejor que cerca de la línea. Perfecto en la marca, complicado en algunas salidas.
6- Caruzzo: Sigue sin ser el líbero que todos conocemos de la época de Argentinos. ¿Lo será algún día?
13- Insaurralde: Horrendo en el gol del visitante, levantó con el correr de los minutos.
16- Somoza: Arrancó muy mal. Se confió en una pelota y terminó en gol contrario. El resto del PT erró cuanto pase intentó. Para el segundo tiempo cambió totalmente la cara, volvió a comerse la cancha y robó cuanta pelota le pasó cerca. Marcó, jugó e intentó al arco, estaría muy bueno que dejen de ir todas afuera.
4- Calvo: Correcto hasta que se lesionó y tuvo que salir. No se hace problema en ataque, y siempre está para defender. Una garantía pensando en el arco propio.
3- Clemente: Venía muy bien, tanto por izquierda como por derecha, pero los dos errores groseros que hizo perdiendo esas claras contras lo condenan.
11- Erviti: Mejorando de a poco. A lo largo del partido fue elevando su imagen. Todavía queda mucho por explotar de un muy buen jugador.
21- Chavez: Como siempre, a base de garra y ganas logra arrancar aplausos. Si tan solo terminara bien el 50% de las que hace…
10- Riquelme: No le gustó que le mojen la oreja y se hizo cargo del asunto, creó él la falta y la definió como sabe. Y, cuando quiere jugar…
9- Palermo: Erratico, para el lado del arco y de compañeros, ésta vez ni dio buenos pases. De todas formas, te banco a muerte Martín.
18- Monzón: Esta vez entró bien. Claro, sin ningún tipo de responsabilidad en defensa, solo se dedicó a atacar y ser siempre opción por izquierda.
7- Mouche: La asistencia vale la amplia aprobación.
27- Viatri: Gran figura del partido, en 25 minutos en cancha. Hizo todo lo que Martín no pudo. Dio una asistencia anulada, jugó bien con la pelota, dio buenos pases, bajó bien la pelota y, por supuesto, convirtió el gol más importante para Boca en lo que va de campeonato.

El resumen del partido con los goles.