Gracias a los buenos cambios de Ischia, Boca ganó un partido que parecía fácil y que terminó siendo un sufrimiento (para variar).
Gran actuación de Lucas Viatri, que marcó a los 7 del primero con un preciso cabezazo tras centro de Riquelme. Y a 3 del final le bajó el balón a Nico Gaitán para que éste defina el 2-1 con el que se le ganó al débil Rosario Central (que sigue último con River).
Hay que remarcar, y perdón si insisto con esto, los cambios del técnico de Boca. La entrada de Pablo Mouche y el ya nombrado Gaitán fuaron fundamentales para ganar y ponerse a 5 de CASLA, -que ante todos los pronósticos perdió con Racing por 2 a 1 y puso calentito el torneo (Tigre, el segundo, ahora está a 2 de los cuervos)-.
Resumiendo cortito y al pie: Boca ganó, si, pero nada más. Dejó muchísimas dudas. Le sigue costando mantener el resultado, le sigue costando mantener el 0 en su arco, es claro que cada gol en contra es como un gigante balde de agua helada del cual le cuesta recalentarse. Pero…se ganó, y eso vale. A demás, gracias a la academia, no es tan disparatado pensar en el campeonato, y más teniendo en cuenta que, si se dan algunos resultados, en una semana se puede estar en lo mas alto.
Entre semana con Banfield y el domingo con San Lorenzo, los próximos dos compromisos de suma obligación ganadora que tiene el Xeneize.
Fe? hay, esperanza? intactas, ganas? Siempre… fútbol? Eso se espera.
Jugar bien es lo primordial, pero ganar es lo único que importa. Hay muchas cosas para cambiar, pero también mucha confianza de que con lo que se tiene no es para nada difícil.
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